El Servicio de coordinación y ayuda a las oficinas de protección de menores envía esta semana a las Oficinas diocesanas y a las de las congregaciones religiosas una solicitud de datos para elaborar el informe anual que se presentará en el primer trimestre del próximo año. En el informe se trata de conocer el trabajo realizado durante este año en las más de doscientas Oficinas, que fueron creadas en 2020 a partir del Motu Propio Vox estis lux mundi.
Objetivos del informe
Además de las personas acogidas en las diversas oficinas y de los casos recibidos, así como del acompañamiento pastoral y jurídico que se ha podido llevar a cabo, el informe busca también conocer las actividades de prevención, de formación y de protección realizado entre agentes de pastoral, sacerdotes, seminaristas o monitores de tiempo libre. El pasado mes de marzo se presentó el primer informe con el trabajo realizado en los dos primeros años.
Con esta solicitud de datos y la elaboración del informe se da un paso más en el compromiso con la transparencia así como en el objetivo de formar y prevenir a las personas que tratan con menores, no solo para prevenir los abusos en ámbitos eclesiales sino también para detectar en la Iglesia los abusos que se puedan cometer en otros ámbitos sociales.